Pese a lluvias, embalses de riego están a menor nivel que el año pasado

El aumento de precipitaciones y nieve en estos días no ha sido suficiente para contrarrestar las bajas reservas que actualmente hay en los embalses del país. Así lo consignó el ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, que dio a conocer el detalle de la situación hidrológica en Chile, tras los frentes de mal tiempo de esta semana.

Las represas se dividen por uso en aquellas que el agua se utiliza para consumo humano y las que se utilizan para riego y generación energética. Moreno señaló que las destinadas a la agricultura son las que más se han visto afectadas por la megasequía, y que esta situación se ha agravado a la fecha.

"Producto de la sequía que estamos viviendo los embalses siguen cayendo y sólo sabremos en primavera-verano si van a recuperarse a los niveles que teníamos antes. El año pasado estaban al 60% de su capacidad y en este momento tenemos lo embalses de riego solamente a un 40%", dijo la autoridad.

Eso sí, la mayor preocupación reside en los embalses utilizados para el agua potable. El año pasado estas represas estaban a un 35%, y hoy día están en 33%. "Estos números son bajísimos, porque es básicamente la mitad de lo que tenemos normalmente como reserva de agua para las principales ciudades del país", señaló.

Los embalses más relevantes a nivel nacional son El Yeso (Región Metropolitana) y Los Aromos (Valparaíso). Moreno señaló que la mayor preocupación actualmente recae en este último, dado que "hoy está muy lejos de 2019 y de su capacidad histórica", y considerando que abastece a todo el Gran Valparaíso es necesario aumentar las reservas de agua, pues es clave para el abastecimiento de la zona en primera y verano.

En la capital la situación es más sostenible, dado que se está utilizando el agua mayormente proveniente del Río Maipo, por lo que la capacidad utilizada de El Yeso está en un nivel similar al año pasado.

El ministro dijo que están trabajando para que no haya racionamiento hídrico en el verano 2020-2021, y que los antecedentes del año pasado -hasta ahora el más crítico en cuanto a sequía- ponen buenas perspectivas, pues se logró pasar sin racionamiento de agua ni energía.

Lluvias se duplican

Hasta el 24 de junio, las precipitaciones a nivel nacional exceden lo que se tenía a esa misma fecha en 2019. Ese es el caso de Santiago o Valparaíso, donde la caída de agua se duplicó e incrementó nueve veces, respectivamente.

Moreno calificó este fenómeno como "un respiro", pero fue enfático al señalar que "no terminan con la sequía ni mucho menos". Esto, porque pese al positivo desempeño, de igual manera están lejos de sus registros históricos.

En el caso de la capital, las lluvias pasaron desde 35 mm en 2019 a 76 mm este año, pero sigue siendo la mitad del agua caída en un año normal (165 mm). En tanto, en la V región pasaron de 7 mm a 66 mm, pero sigue estando muy por debajo de los 114 mm que cae de agua en un año normal.

Respecto a la nieve la situación es similar, pues en la mayoría de las seis regiones donde actualmente existe decreto de escasez hídrica ha habido un aumento en la nieve caída respecto del año pasado, pero siguen estando lejos de los registros históricos.

Por ejemplo, en la región de Valparaíso (estación Portillo) ha habido 124 mm de nieve, mientras que en 2019 sólo cayeron 65 mm. Este incremento equivale a la quinta parte de lo que se registra en un año normal (568 mm).

Moreno enfatizó en que, pese a estas positivas señales, aún es necesario ver qué ocurrirá dentro de los próximos meses, pues en julio y agosto se determina el total de lluvia para el año. Es decir, es clave para saber las reservas con las que se contará el resto del año.